La presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Nancy Pelosi, llegó a Taiwán a última hora del martes, iniciando una visita que Pekín le había advertido que no hiciera, diciendo que socavaría las relaciones chino-estadounidenses.
Pelosi está realizando una gira por Asia que incluye visitas anunciadas a Singapur, Malasia, Corea del Sur y Japón.
China reclama como propio Taiwán y un portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores dijo a principios de semana que una visita de Pelosi sería “una burda interferencia en los asuntos internos de China” y advirtió que “el Ejército Popular de Liberación chino nunca se quedará de brazos cruzados”.