Los países de la Unión Europea (UE) y los negociadores del Parlamento Europeo anunciaron este martes un acuerdo para adoptar un cargador universal para teléfonos inteligentes, tabletas y dispositivos portátiles a más tardar en el otoño boreal de 2024, en un duro revés para Apple.
La normativa impondrá para todos esos aparatos un puerto USB-C con el objetivo de limitar los desechos tóxicos de miles y miles de cables de diversos formatos, y defender el derecho de los consumidores, obligados por ahora a acumular diversos cargadores.
El proyecto había enfrentado la feroz oposición del gigante tecnológico Apple, que defiende su tecnología de carga y conexión Lightning.
La normativa legal aún deberá ser formalmente ratificada por el Parlamento Europeo y los 27 estados del bloque para que pueda entrar en efecto.
El comisario europeo de Industria, Thierry Breton, destacó que el acuerdo fue alcanzado después de apenas nueve meses de negociaciones, y apuntó que “esto significa que podemos movernos rápidamente cuando hay la disposición política”.
De esa forma, añadió el funcionario francés en una conferencia de prensa, “hemos sido capaces de decirles a los lobbies: ‘Nos van a disculpar, pero esto es Europa y estamos trabajando por nuestra gente'”.
Poco antes, en Twitter, Breton había señalado que con el acuerdo “el interés general de la Unión Europea ha prevalecido”.
En una nota de prensa, el Parlamento Europeo apuntó que el proyecto “es parte de un esfuerzo más amplio de la UE para hacer que los productos en la UE sean más sostenibles, reducir los desechos electrónicos y facilitar la vida de los consumidores”.