Finlandia decidirá “en unas semanas” si presentará su candidatura para ser miembro de la OTAN, afirmó este miércoles la primera ministra Sanna Marin, en pleno debate en su país sobre esta cuestión a raíz de la invasión rusa de Ucrania.
“Yo creo que ocurrirá rápidamente. En unas semanas, no meses”, declaró Marin en una conferencia de prensa en Estocolmo junto a la primera ministra sueca Magdalena Andersson, cuyo país también se está planteando si se incorpora a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
Las declaraciones de Marin tuvieron lugar antes de que el gobierno finlandés publique un informe clave sobre su situación estratégica tras el ataque lanzado por Moscú contra Ucrania el 24 de febrero y a una semana de la apertura de un debate en el Parlamento sobre la posible adhesión a la Alianza Transatlántica.
Sin expresar abiertamente su preferencia, la líder finlandesa destacó las ventajas de ser miembro de la alianza militar, y no solo un socio, como lo es actualmente Finlandia.
“No hay otra forma de tener garantías de seguridad que en el marco de la defensa conjunta y la disuasión, tal y como garantiza el artículo 5 de la OTAN”, aseguró la responsable socialdemócrata, cuyo partido era históricamente contrario a la Alianza Transatlántica.
Paradójicamente, fue una guerra lanzada por Moscú citando la ampliación de la alianza militar occidental hasta sus puertas la que podría empujar a su vecina Finlandia a las filas de la OTAN para obtener el beneficio de la protección de ese famoso artículo.
Antes de la invasión a Ucrania, ver a Finlandia romper su histórico no alineamiento militar era apenas una opción retórica sin mayor apoyo.
Pero en pocas semanas todo cambió: el apoyo a la adhesión, que durante décadas osciló entre 20% y 30%, llegó a 60%. El último sondeo publicado el pasado lunes le daba 68% de apoyo frente a solo 12% en contra.