Al menos diez personas murieron y cuatro resultaron desaparecidas en las violentas tormentas que cayeron la madrugada del viernes en el centro de Italia, devastando viviendas y calles, una tragedia que ha abierto el debate sobre las medidas a tomar frente al cambio climático.A una semana de las elecciones legislativas, la tromba de agua que devastó varios pueblos en pocas horas y que dejó muertos, desaparecidos y heridos, ha generado un debate nacional por la ausencia de alerta ante el inesperado fenómeno.”Cayeron 400 mm de lluvia en 6 horas en una zona donde suele caer 1.500 en un año. Esto definitivamente está ligado al cambio climático y necesitamos acostumbrarnos y adaptarnos. Este es el futuro, una muestra del futuro, necesitamos construir nuestra resiliencia”, explicó a la AFP Paola Pina D’Astore, de la sociedad italiana de geología ambiental.Entre los desaparecidos figura un niño de seis años que se encontraba con su madre en un vehículo. La mujer fue rescatada por los bomberos pero la fuerza del agua se llevó al chico.”El centro histórico de Cantiano ya no existe. La plaza principal fue arrollada por la fuerza del lodo que invadió y destruyó los bares, la farmacia, los comercios, llevándose todo el mobiliario, todo”, contó conmovida Natalia Grilli, la adjunta de la alcaldía de Cantiano, en la región de Las Marcas.La zona más afectada es la provincia de Ancona, pero las lluvias también sacudieron la región vecina de Umbría.Varios meteorólogos consideran que esos fenómenos se multiplicarán en todo el país en los próximos meses debido al anómalo verano y a la extensa ola de calor con temperaturas récord de hasta 42 grados en medio de la mayor sequía de los últimos 70 años.”Ha muerto gente y por eso hoy el interés por la catástrofe climática es mayor. Esto debe hacernos reflexionar. La muerte nos pone en contacto con nuestros valores. ¿Qué queremos hacer con nuestras vidas mientras el Estado italiano no hace nada para reducir emisiones y evitar decenas de miles de muertes similares en los próximos años?”, lamentó por su parte Michele Giuli, activista del movimiento en defensa del medio ambiente “Ultima generación”.- Un fenómeno imposible de predecir -En un video de los bomberos filmado en la ciudad de Senigallia se puede ver a los rescatistas en medio de calles desiertas, con el agua hasta la cintura, tratando de ayudar a personas que reman en un bote. El agua también invadió los sótanos y muchos autos fueron arrastrados por la fuerza de la corriente o sepultados por deslaves. La caída de árboles y los deslizamientos de tierra han cortado muchas carreteras locales, lo que dificulta el trabajo de los bomberos.”Decenas de personas que se habían refugiado en los árboles y en los techos de las casas fueron rescatados”, escribieron los bomberos en su cuenta de Twitter la mañana de este viernes. “Más de 150 intervenciones han sido realizadas”, precisaron. “Esto se llama crisis climática, no mal tiempo”, reaccionó por su parte en Twitter la rama italiana de “Fridays for Future”, el movimiento juvenil para la defensa del clima, mientras que el presidente de la Cruz Roja Italiana, Francesco Rocca, reconoció que “está preocupado por el aumento de los fenómenos climáticos extremos” en toda la península. Algunos alcaldes de la zona lamentaron que nadie les avisara del peligro, mientras el experto Bernardo Gozzini, del Centro Nacional de Investigación, aseguró que se trató “de un fenómeno imposible de predecir”.Faltando una semana para las elecciones legislativas del 25 de septiembre, muchos líderes políticos han manifestado su apoyo a la región, entre ellos Matteo Salvini, líder de la ultraderechista Liga y Enrico Letta, del Partido Democrático (PD, centro-izquierda). El presidente de Las Marcas, Francesco Acquaroli, indicó que recibió llamadas telefónicas de solidaridad del presidente de la República Sergio Mattarella y del jefe de gobierno Mario Draghi, quien visitará en la tarde esa región.